4 de febrero de 2008

Venezuela: donde ser un héroe es pecado

En todos los países del mundo, se han hecho y se hacen hazañas memorables. Sin embargo de algunas tenemos noticia y de otras no y no es por que algunos países tengan mejores medios de comunicación que otros, ni porque CNN llegue o no al lugar del suceso; la clave está en el orgullo de cada pueblo por sus héroes y/o logros locales y en el correcto conocimiento de su historia. He tenido la oportunidad de conocer distintos paises de América y Europa y he visto con estupor como al parecer, nuestros únicos focos de atención (aparte de los chistes en Aló Presidente) son las novelas y nuestras misses (aunque ultimamente no han ganado nada). Somos un país donde se han hecho muchas y grandes cosas pero parece que nos avergonzamos de ellas; o es que pretendemos que la gente lea sobre Venezuela o que venga aquí solamente por arte de magia. Tenemos que empezar nosotros mismos promocionando lo bueno (porque lo malo sobra) para que nos conozcan y nuestro nombre sea conocido. Empecemos por Simón Bolívar, el cual tuvo que ir a morir a Colombia a casa de un español, porque fue traicionado por su propio y recien emancipado pueblo. Al margen de esto y para ser fieles a la historia, hay que decir que la estatua ecuestre que se encuentra en la Plaza Bolívar de Caracas, debería tener al caballo con las cuatro patas sobre el pedestal, pues las estatuas con caballos rampantes se erigen sólo en honor de los caidos en el campo de batalla, y como todos sabemos "El Libertador" murió a causa de la tuberculosis una vez terminada la guerra. Pero tenemos más desconocimientos históricos, tal es el caso del científico Jacinto Convit, quien inventó la vacuna contra la lepra y si hubiese desarrollado su logro en otro país, quizás sería tan conocido como Gutenberg o como Marie Curie. En las letras tenemos el caso por ejemplo de Rómulo Gallegos que es nuestro "Cervantes" local, del cual tampoco nos hemos molestado en difundir su obra, ni tan siquiera es obligatoria su lectura en el sistema educativo. Pero no sólo contra los héroes lanzamos nuestra desidia, también lo hacemos contra los logros materiales. Poseemos el mejor cacao del mundo (podriamos aprender de Colombia, la forma en como promocionan su café a nivel global), tenemos el teleférico de Mérida, el más largo y alto del mundo (en el mundo suenan los nombres Aconcagua o Titicaca, pero pico Bolívar o pico Espejo... ¿qué es eso?). Es triste reconocerlo pero es así, somos una nación sin presencia internacional gracias a nosotros mismos; afortunadamente el "Salto Ángel" se libra del desconocimiento mundial y es un hito de la naturaleza. Muchas gracias a quien lo encontró Jimmy Angel... un gringo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esteeee.... que te puedo decir.... tu arcticulo me deja sin palabras...